'Ustedes no saben leer'. "existe otra mayoría posible: socialistas y las demás izquierdas"


En La Factoría, la revista catalana de pensamiento social más leída en el mundo, http://www.revistalafactoria.eu/ su director Carles Navales Turmos ha publicado el siguiente artículo que me parece interesante reproducir


'Ustedes no saben leer'
13-05-2009

“Existe otra mayoría posible: socialistas y las demás izquierdas"
En España, el Partido Socialista tiene un enorme poder político y, sin embargo, se encuentra más solo que nunca: a mi parecer, quizá porque tanto poder tiene.

Preside el gobierno central; menos cuatro, todos los autonómicos, con Catalunya y Euskadi incluidas; los principales ayuntamientos, a excepción de Madrid, Valencia y Bilbao; es mayoritario en el Parlamento Europeo; y, globalmente, gana todas las elecciones. Aún así, está solo. El debate sobre política general, que se inició ayer y termina hoy miércoles, lo indica: ningún grupo parlamentario le ha dado soporte.

La evolución democrática que está viviendo España rompe viejos esquemas. La sociedad avanza hacia una federalización, que a muchos partidos les cuesta digerir, y que es producto del desarrollo constitucional: la descentralización del Estado ha calado territorialmente, tanto en las derechas como en las izquierdas de las autonomías. El presidente Zapatero acaba de remodelar su gobierno con la intención de apostar fuerte por el programa de cambio que presentó en las elecciones. Un tema central de su apuesta es el Estado de las autonomías, al que hay que acomodarse constantemente, ya que evoluciona por sí mismo.

El PSOE, “programáticamente” partido federal, comienza a serlo “de hecho” ahora, cuando los socialistas catalanes y vascos han decido, por sí mismos, formar gobierno en Catalunya y Euskadi. Este hecho, que significa federalizar la política socialista y, con ella, el Estado, no lo han sabido encajar los nacionalismos. Para éstos, el federalismo consistía en que los socialistas permitieran gobernar a las coaliciones nacionalistas en su territorio a cambio de darles el voto en el parlamento español; lo mismo cuando gobernaba el Partido Popular, como antes con UCD. O sea: yo te apoyo a ti en tu territorio (España) y tú me apoyas a mi en el mío (Catalunya y Euskadi).

Sin embargo, los nacionalismos no admiten la federalización cuando en las comunidades autónomas donde residen la voluntad popular opta por otras combinaciones políticas. Lo del PP es más grave. En el debate, su líder, Mariano Rajoy, espetó esta frase a los parlamentarios socialistas: “¡Pero si ustedes no saben leer!”. Y es que se la pinta en calva para hacer cierto el dicho: “Por la boca muere el pez”. Entusiasmado por los buenos resultados que le prevén las encuestas en las elecciones europeas, ya celebra la victoria: mejor manera de perder porcentaje no la hay.

El odio de clase parece avivarse periódicamente en un partido que no soporta que quienes perdieron la guerra civil ocupen el poder del que disfrutaron, por mérito de las armas, sus padres y abuelos. Y, lo grave, es que cuando nos parece que lo ha superado, reincide.

La encrucijada que alimenta la soledad del presidente Zapatero es ésta:

1. Si quiere el apoyo de los nacionalistas periféricos, está obligado a no respetar la voluntad de los catalanes y los vascos expresada mediante sufragio universal, que ha dado la presidencia a los socialistas y dejado a los nacionalistas en la oposición.
2. Si Zapatero no reacciona, el Partido Popular le tejerá una tela de araña con los nacionalistas.
3. Existe otra mayoría posible: socialistas y las demás izquierdas.

Quizá el presidente Zapatero deba explorar la tercera opción: la sociedad española es hoy lo suficiente madura para aceptar tal combinación (cabe esperar que cada una de las izquierdas también). Además, por más problemas que pueda haber, la lealtad siempre será superior a la que están exhibiendo los nacionalismos. Y es que, o tira hacia delante con su programa de cambio, como se ha propuesto, o el futuro se le volverá en contra.

Comentarios

Entradas populares